LA FRASE

"Una vez descartado lo imposible, lo que queda, por improbable que parezca, debe ser la verdad."

Sir Arthur Conan Doyle

sábado, 15 de marzo de 2014

MEDITACIÓN DEL AFORISMO

El aforismo, después de todo, quizás no sea más que una frase. Una frase breve que nos deslumbra, por un momento o perdurablemente. Una frase feliz. Del tipo que sea, porque ya se sabe que la felicidad puede tener rostros muy distintos. Pero sólo eso, una frase. 

Y tal vez por eso el aforismo no pueda constituirse en género. Porque una frase puede ser de cualquier género. O sea, encontrarse embutida en cualquier género, narrativo, lírico, ensayístico.

Estaba leyendo ahora La invención de la pólvora, un estupendo libro de recuerdos y evocaciones de Aquilino Duque, y a cada paso, me voy encontrando con frases que son como hachazos, como aforismos.

Por ejemplo, ésta:

Lo peor de la pubertad no es que la vida se complique, sino las ganas que se tienen de vivir complicadamente.

O estotra:

Nunca pierden su hechizo los lugares en los que nunca se estuvo.

Y es que, donde menos lo esperas, salta la frase, digo, el aforismo. 

2 comentarios:

JOSÉ LUIS MORANTE dijo...

He sentido lo mismo que tú en muchas lecturas: poemas que terminan con un aforismo, novelas que subrayan el argumento con una frase aforística, anotaciones de diarios... eso denota el carácter transversal del aforismo y su plena vigencia actual. A mí, el aforismo me encanta: es un ejercicio de filosofía liliputiense que ayuda a percibir lo que nos pasa a diario. Un fuerte abrazo, Enrique.

Aquilino Duque dijo...

Muchas gracias por tu inteligente lectura y un fuerte abrazo,