| No debe existir en absoluto |  44% | 27 |
| Debe pagarlo el Estado |  31% | 19 |
| Debe pagarlo el usuario |  25% | 15 |
Paramos el contador. Ahí quedó (cuando los votos son 61). ¿Conclusiones? No sé si de una encuesta, o de una estadística, se pueden sacar conclusiones. Pero, observaciones, yo saco éstas.
Los partidarios de que no haya que pagar canon alguno son 27 (44%), pero los partidarios de que sí son 34 (56%). Una diferencia discreta, aunque en modo alguno abrumadora.
Ahora bien, como de estos últimos 19 (31%) opinan de que debe pagarlo el Estado, y sólo 15 (25%) que lo debe pagar el usuario, podemos sumar los dos primeros grupos (que no se pague o que lo pague el Estado), y entonces sí que sería la diferencia abrumadora: 42 (75%) frente a 15 (25%). La inmensa mayoría entiende que él/ella no tiene que pagar por lo que lee en una biblioteca. Y si alguien tiene que resarcir al editor/autor, pues... allá se las compongan.
No sé si los votantes conocen la diferencia entre el canon bibliotecario (pago por ejemplar prestado) y el canon que pretende implantar (o ha implantado ya) la SGAE, que no es por lo que te descargas o reproduces, sino sobre lo que podrías descargar o reproducir. O sea, la vieja distinción entre acto y potencia. Doy en suponer que sí, que la diferencia es conocida.
Lo curioso es que cuando él/ella va a un video-club a alquilar una película (vamos, a que se la presten), paga sin rechistar. A mí esto es lo que me choca. No sé a vuesasmercedes.
En fin, que pronto abriremos la nueva encuesta. Y ya anunciamos el tema: los suplementos literarios.
3 comentarios:
¿Y quién es ese "zeñó" que se llama Estado y que debe pagar los cánones?.
¿El Estado produce dinero?. ¿El Estado trabaja?. ¿O el Estado roba a los ciudadanos para después distribuirlo con su omnipotencia sabiduría?.
Zapatero a tus zapatos, y el Estado a lo que tiene que hacer: seguridad y justicia. Lo demás lo que quieran los ciudadanos (seguridad social, educación..), pero ¿el canon?
Algunas consideraciones.
En primer lugar, y que yo sepa, los videoclubs no van a cargo del presupuesto público, las bibliotecas sí.
La segunda es ya una consideración personal: no me gustan los ventajistas. No se puede estar al mismo tiempo reclamando la excepción cultural y aquello del mercado, y sólo aquello, que nos interesa.
(Lo de ventajista no va por usted, sino por los tipos de la SGAE.)
Es lo que tiene ir al rebufo de la SGAE, que te salpica la antipatía que va generando.
Voilà! Aquí dejo un enlace para que los partidarios de imponerlo lean lo que opinan profesionales de la que puede considerarse la segunda biblioteca más grande de España: la de la Universidad Complutense de Madrid: http://www.ucm.es/BUCM/biblioteca/14794.php.
El que suscribe, aunque publica habitualmente, está totalmente de acuerdo con ellos; claro, que mis trabajos son científicos y no literario-churriguerescos (ergo no me hago ilusiones con vivir de ello): “escribir en España es llorar”, dijo Larra. “Sobre todo si se trata de ciencia”, añadiría yo.
Los de la UCM, auxiliados por algunos otros sectores --incluso muchos escritores y muchas escritoras (hay que ser políticamente correcto)--, tienen más razón que un santo. Y los de la SGAE son unos piratas. ¿Pero qué es eso de aplicar la teoría del “por si…”? ¿Pero dónde se ha visto que te cobren un canon “preventivo” (¡qué juego da Georges Bush!) por si acaso pirateas? Es como si la policía te detuviese antes de realizar un delito para evitar que lo cometas. El no va más… Y yo con estos pelos.
Saludos desde el Nibelheim.
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