LA FRASE

"Una vez descartado lo imposible, lo que queda, por improbable que parezca, debe ser la verdad."

Sir Arthur Conan Doyle

domingo, 23 de septiembre de 2012

¿SERÁ ASÍ, VERDADERAMENTE?

El historiador tiene ante sí un depósito inmenso de hechos, personajes y episodios. ¿Qué hará con ellos? ¿Cómo los colocará en las páginas de su libro? Del modo como los coloque dependerá la historia. Porque la historia no es más que la subordinación de unos elementos a otros en el curso del tiempo. La sensibilidad del historiador juagará un papel importante en la obra. El fugitivo y efímero humor decide a veces. El humor que el historiógrafo tenga en tal o cual día -el día en que escriba acerca de Felipe II, por ejemplo- decidirá que Felipe II, en el conflicto con su hijo don Carlos, sea un padre cruel  o un político prudente. El historiador no puede desasirse de sí mismo. El historiador, como el poeta, como el filósofo, como el político, está siempre consigo mismo. No puede ser otro que él mismo. Y lo que hace su desgracia hace al mismo tiempo su grandeza. Porque la historia se hace, en último término, gracias a la individualidad del historiador.

Azorín, ¿Qué es la historia?, ed. de Francisco Fuster, Madrid, Fórcola, 2012.

martes, 18 de septiembre de 2012

domingo, 9 de septiembre de 2012

UN POEMA ¿CULTURALISTA?


UNA CARTA DE CHRISTIANE VULPIUS QUE NUNCA
LLEGÓ A JENA




Confieso que me gustan los vinos y los bailes.
Me pierden los placeres de la mesa.
Y lo más grave
                                   es que he engordado mucho.

Mi risa y mi valor asustan
a esas señoronas de la Corte.

Y, sin embargo,
un día sobre mi espalda
escandías tus versos,
y al rozar mis caderas
me dijiste al oído
que tus ojos tocaban y tus manos veían.

Sé que me amaste como sólo un dios
puede amar.
Pero eras sin embargo un hombre
y yo una mujer.

Un día sabrás
lo que duele el dolor
cuando te amputan.

Y escribirás entonces mi epitafio.

Yo sé que será breve y verdadero.

Y sé también que nunca
—a pesar del laurel y de los mármoles,
a pesar del amor y su espejismo—,
cuando yo haya partido, volverás a sentirte
nunca, jamás, un dios
que recibe plegarias y premia con milagros.

Escribí este poema, incluido en la colección El argumento inacabado, tras haber leído Christiane y Goethe. Historia de una relación, de Sigrid Damm. Pero, ¿se trata por eso de un poema culturalista? Los detalles son exactos. A Christiane le gustaba beber y bailar. Lo de escandir los versos en su espalda es una cita de un poema de Goethe. Y, sí, también Goethe escribiría un breve epitafio tras la muerte de su mujer. Pero, más allá de la historia de Goethe y Christiane, ¿no es quizá la historia de todo amor que dura y permanece en el tiempo, con su poquito de ilusión y de expectativa y su poquito de desengaño, su pizca de frustración, por no ser lo que pudo haber sido?

No, no hace falta conocer al detalle la historia de Christiane Vulpius y Johann Wolfgang von Goethe para que nos emocione una historia de amor desgastado por el uso.

sábado, 8 de septiembre de 2012

LA FEMME PAUVRE, POR LÉON BLOY

No se me ha caído de las manos. Al revés, la he ido leyendo con sostenido interés. Y dos veces, además, una primero en el original francés, la otra en español. Un atractivo no menor es su estilo desaforado y su adjetivación imprevista. Pero el mayor es su parábola, aquello que nos propone.

Al final, sin embargo, me quedo perplejo, desconcertado. ¿Es quizás por cosas como ésta, cuando, después del rápido desenlace, el narrador, después de informarnos de que


"Après la mort de Léopold, dont le corps ne put être retrouvé parmi les anonymes et épouvantables décombres, Clotilde avait tenu à se conformer à celui des Précepts évangeliques dont l'observation rigoureuse este jugée plus intolérable que le supplice mème du feu. Elle avait vendu tout ce quu'elle possédait, en avait donnée le prix aux plus pauvres et, du jour au lendemain, était devenue une mendiante."

nos dice aquello de que

"A force de souffrir, cette chrétienne vivante et forte a deviné qu'il n'y a, surtout pour la femme, qu'un moyen d'être en contact avec Dieu et que ce moyen, tout à fait unique, c'este la Pauvreté. Non pas cette pauvreté facile, interessant e complice, qui fait l'aumône à l'hyprocrisie du monde, mais la pauvreté difficile, révoltante et scandaleuse, qu'il faut secourir sans aucun espoir de gloire et qui n'a rien à donner en échange."

Y aun esto otro

"Elle a même compris, et cela n'est pas tres loin du sublime, que la Femme n'existe vraiment qu'à la condition d'être sans pain, sans gîte, sans amis, sans époux et sans enfants, et que c'est comme cela seulement qu'elle peut forcer à descendre son Sauveur."

Ya oigo en mí mismo los resortes de la conciencia moderna: ¿Por qué surtout pour la femme? ¿Y por qué la Pobreza, rebelde y escandalosa, si precisamente la pobreza es nuestra condena ineludible, tal y como estamos padeciendo en los tiempos que nos ha tocado vivir? ¿Por qué sin pan, sin morada, sin amigos, sin esposo y sin niños? ¿Nos propone acaso Bloy que nos convirtamos todos en mendigos?

Pero, ¿qué es la Pobreza? La solución, un día de estos.

miércoles, 29 de agosto de 2012

JAIME GARCÍA-MÁIQUEZ, ORTÓNIMO

No debería pasar desapercibido este poemario, aunque, publicado en una minoritaria editorial, es de temer que ni siquiera llegue a las librerías. Sin embargo, Oh, mundo resulta de lectura imprescindible para cualquier amante de la buena poesía y ha sido señalado ya por lectores atentísimos como José Luis García Martín, Andrés Trapiello, Ángel Ruiz o Julio Martínez Mesanza

Su autor, Jaime García-Máiquez, ya no es, sin embargo, y como habrán podido juzgar por los enlaces, un perfecto desconocido. Autor de Vivir al día (1999) y Otro cantar (2007), sin contar la producción de su heterónimo Fernando López de Artieta (Jugar en serio, de 2004 y Grosso modo, de 2011), este tercer poemario, Oh, mundo, le confirma como una voz personal y auténtica.

Para nosotros, el primer valor del libro, el primero por orden de aparición, radica en el prólogo. Albergamos el tozudo prejuicio de que un poeta que no sea capaz de escribir buena prosa tampoco será capaz de escribir buenos versos. En su prólogo, García-Máiquez nos pone en suerte su verdadero malditismo: "el destino me ha concedido un insólito regalo: ser maldito, pero de verdad... Me bastó con contar los versos con los dedos, escribir sonetos, creer en la rima y en Léon Bloy, descreer de esa dictadura basada en la publicidad: la democracia, no hacer feos a la belleza, ir a misa y rezar el santo rosario. No me canso de darle gracias a Dios."

Y como un himno de acción de gracias podría entenderse este poemario en el que un don nadie, un cualquiera que es eso, un cualquiera, fuera del recinto del Museo del Prado, alguien que por no tener no tiene ni siquiera eso tan fácil, una opinión, entona su cantar de caridad hacia los verdaderos desheredados de este mundo. Y entonces sucede el milagro:

Yo soy ellos, y ellos
han dejado de ser esos anónimos
hombres que pasan, para ser hermanos
de sangre y alma, hijos misteriosos
de un misterioso amor que nos embarga,
de un amor que lo llena de amor todo.

Algo más que aseados versos hay en este libro. Algo que si no es la luz, se le parece muchísimo.

sábado, 25 de agosto de 2012

POESÍA DE LA EXPERIENCIA




Me dicen que no alcanzo a ser filósofo
ni escucho las palabras del silencio,
que me limito a dar
vueltas alrededor de mi experiencia,
que es la misma experiencia de los otros.
Que más que cabalgar sobre la ola
me ahogo en las orillas de mi llanto.
Me han avisado de que el mundo cambia
cada vez que su rostro impredecible
posa ante los fotógrafos.

Y, sí, el mundo cambia;
conocerá la tierra nuevas glaciaciones
y episodios de fuego y de ceniza,
guerras, revoluciones
y nuevas metafísicas y ciencias,
pero el tiempo geológico no es mío,
ni siquiera la historia que me lleva,
sólo esta gota es mía
y cuando caiga habrá acabado todo.

De mi libro El argumento inacabado, Ferrol, Esquío, 2005

jueves, 16 de agosto de 2012

JUAN RAMÓN, BERGAMÍN Y MACHADO

Definitivamente, a Juan Ramón no le gustó nada el prólogo que antepuso Bergamín a la Obras completas de Machado, que publicó en 1940 para la editorial Séneca. Las relaciones de Juan Ramón con Bergamín estaban envenenadas, por lo mismo que un día fueron amistosas y estrechas. 

Tras llamar a Bergamín "prologuero de muertos indefensos" le reprocha "prologar una obra escrita casi en su totalidad antes de cualquier circunstancia social, por grave que ésta sea, y destacar casi exclusivamente esa circunstancia y su relación con la obra", pues esto supone, a juicio de Juan Ramón, "relegar casi totalmente también esta obra a un segundo plano, del mismo modo que ocurriría con una vida".

No se puede negar que esto es lo que hace Bergamín en su prólogo, aunque quizá la cercanía de la guerra, sólo acabada un año antes, le sirva de disculpa. 

Tampoco le gustó a Juan Ramón cierta comparación que hacía Bergamín entre la vida anterior del poeta y la que "disfrutó" durante la guerra:  

"No me parece acertado decir que Antonio Machado vivía antes de la guerra en cuartuchos pequeños, en los que vivían tantos que como él arrastraban su vida española; y que sólo la guerra y la muerte le ofrecían el palacio y los jardines en que él hubiera querido o debido vivir siempre (para llevárselo más a gusto de él). Esto, conociendo a Antonio Machado, tan poco necesitado de suntuosidades, me parece injusto y lijero, y más en las condiciones que traía a todos y a él una guerra de injusticia social."

Sea como fuere, lo cierto es que el mismo año que aparecía en Mexico la edición de Bergamín, se publicaba en Madrid la edición de sus Poesías completas (no lo eran) con el famoso prólogo de Dionisio Ridruejo titulado "El poeta rescatado". Dos intentos paralelos de apropiación... ¿indebida? 

En todo caso, no fueron los únicos, ni serían los últimos.

martes, 14 de agosto de 2012

PARALELISMO

Lo que hace Sánchez Gordillo, ¿no es lo mismo que hace la Agencia Tributaria? Quitarle a los ricos para dárselo a los pobres... La Agencia Tributaria, desde luego, eso sí, lo hace por medios legales... Eso sí. Vamos, lo único.

lunes, 13 de agosto de 2012

JUAN RAMÓN JIMÉNEZ Y LA SEGUNDA REPÚBLICA

Querido Juan Marinello: salí de España en guerra porque quería conservarme libre y comprendí que no podía (*). Yo no voy atado ni empujado adonde me quieran llevar. Soy tan libre como usted o un poco más, ya que no soy político y no adquiero compromisos. No he querido nunca, ni en mi España ni en su Cuba, ni en ninguna parte, levantar el puño, esclavo, a los esclavos que lo levantan, ni estender la mano, esclava, a los esclavos que la tienden. Usted verá, ya que es más joven que yo y vivirá mucho más, por su suerte o su desgracia, cómo muero,  cómo salgo de la vida, como salí de España, libre.

Juan Ramón Jiménez, Guerra en España, edición de Ángel Crespo revisada y ampliada por Soledad González Ródenas, Granada, Point de Lunettes, 2009.

(*) El relato pormenorizado de las circunstancias que rodearon su salida de España, el 22 de agosto de 1936, se encontrará también en otros lugares de este mismo libro.

jueves, 9 de agosto de 2012

PENSAMIENTOS DE VERANO


EL DIABLO



SON las lentas mañanas de mi infancia.
Voy de las musarañas a las musas,
fantástico poeta fantasioso,
aunque aún confunda musa y musaraña.

Y estoy siguiendo el vuelo de ese diablo
que se mece en el aire y en la luz,
con su flotante y blanca cabellera.

Era, sí, la pelusa del vilano,
ese ave breve de la flor del cardo.

Hoy también me entretengo con el diablo,
que divaga en el aire, sin propósito,
en un alto que doy en mi jornada.
Más que en musas me enfrasco en musarañas,
en el vilano que se lleva el viento...

Ya abandoné más altas fantasías.