Que terminara con estas palabras:
"Y ahora, señoras y señores diputados, gritad conmigo: ¡Viva España!"
Y todos hubiesen respondido: "¡Viva!"
Menos, claro, los que ya sabemos.
Porque, en definitiva esos señores están ahí sentados para eso, para que viva España.
O si no, ¿pa qué?
Pero no de Bono, sino de cualquier presidente del congreso, tercera autoridad del Estado, digo, del Reino ( y por cierto, tampoco hubiera estado mal vitorear a S. M.).
¿O es que sólo se va a poder gritar Viva España vestido de uniforme?
País, que decía (antes) Forges.
2 comentarios:
Pero amigo Baltanás, ¿acaso ignora usted que ese tipo de expresiones que reivindica son características de fascistas, reaccionarios y nostálgicos? O, mejor dicho, ¿no sabe usted que España, como nación, realmente no existe ("es un concepto discutido y discutible", afirmó José Luis), sino que nos encontramos en un Estado plurinacional o, más propiamente hablando, en una monarquía parlamentaria pseudofederal asimétrica, plurilingüe y plurinacional? Exite la nación gallega, la catalana, la vasca, la realidad nacional andaluza y otras cosas por el estilo, pero lo que se dice España, la nación española, vamos, ni está ni se la espera (de momento).
Es cierto que las dictaduras y los régimenes demasiado autoritarios han pretendido limitar nuestra libertad quitándonos la posibilidad de expresar nuestras ideas y nuestros sentimientos…Es por esto que dejaron que una expresión de esperanza, de valor, de VIDA como el Viva adquiriera connotaciones que no son las para las cuáles nació…Lo mismo ocurrió en mi pais, cuando un empresario (o mejor: el hombre más rico) se metió en la política y decidió quitarnos la posibilidad de gritar Forza (o sea la esperanza de darle fuerza) a nuestra pobre Italia…
Pero esto no significa que el sentido originario del Viva y de Fuerza pierda valor…
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