LA FRASE

"Una vez descartado lo imposible, lo que queda, por improbable que parezca, debe ser la verdad."

Sir Arthur Conan Doyle

martes, 14 de julio de 2009

La poesía de Víctor Jiménez

Víctor Jiménez reúne su poesía en un volumen editado en la colección Calle del Aire de la editorial Renacimiento: El tiempo entre los labios. Antología, 1984-2008 es su título.

El libro plantea un problema, digamos, teórico: no aparece ordenado según cronología, no se cita la procedencia de los poemas. Si no fuera por la contraportada, ni siquiera sabríamos que Víctor Jiménez ha publicado anteriormente seis libros de versos. El lector puede considerar éste un libro nuevo, o un libro de libros, o una ordenación nueva de la poesía de Víctor Jiménez.

No es mala idea. En la novela, la unidad es la novela, como en la comedia, la comedia. Pero en la poesía, la unidad es el poema. El autor, o el antólogo, tiene derecho a escoger los que prefiera, y a ordenarlos según nuevo criterio, no necesariamente en orden cronológico. Pero, quizás, no hubiera estado de más citar la procedencia, a pie de página o en nota aparte.

Sea como fuere, ya digo, lo que vale es el poema, cada poema, como este que hace honor al título del libro, y que no puede ser más oportuno ahora que hemos llegado a este "Fin de curso":

Se apagaron las aulas, los pasillos,
el griterío en la cafetería,
la lumbre oculta de los cigarrillos...
Se olvidaron los temas de memoria,
la Física, el Inglés, la Geografía...
Historia es ya también la misma Historia.
Y el mes de junio. Y las evaluaciones.
Tan sólo el tiempo sigue cada día
dictando, una por una, sus lecciones.

Leída de otra forma, en otra disposición, en otro orden, la poesía de Víctor Jiménez nos sigue emocionando con sus sabias lecciones sobre esa otra asignatura que jamás se estudia en clase.

8 comentarios:

Javier Sánchez Menéndez dijo...

Tengo interés en leer a Victor, pausadamente. He oído de todo.
Gracias.

Jesús Beades dijo...

Qué gran verso: Historia es ya también la misma Historia.

Anónimo dijo...

SGEUN UN ETSDUIO DE UNA UIVENRSDIAD IGNLSEA, NO IPMOTRA EL ODREN EN EL QUE LAS LTEARS ETSAN ERSCIATS, LA UICNA CSOA IPORMTNATE ES QUE LA PMRIREA Y LA UTLIMA LTERA ESETN ECSRITAS EN LA PSIOCION COCRRTEA. EL RSTEO PEUDEN ETSAR TTAOLMNTEE MAL Y AUN A SI PORDAS LERELO SIN POBRLEAMS. ETSO ES PQUORE NO LEMEOS CADA LTERA POR SI MSIMA, SNIO LA PAALBRA EN UN TDOO. PRESNOAMELNTE; ME PREACE ICRNEILBE QUE TNATOS AOÑS DE COLGEIO SE VYAAN A LA MRIEDA !!!

Enrique Baltanás dijo...

La unidad de significado es la palabra, no la letra, o mejor dicho, el fonema, que sólo es "la unidad mínima de distinción", según nos enseñaron en la facultad.
La ordenación de los poemas no es problema baladí. Ahí está el caso de las rimas de Bécquer. A su muerte, sus amigos las ordenaron según les pareció, no como estaban en el manuscrito del llamado "Libro de los gorriones". Y todavía siguen los filólogos dándole vueltas al asunto.
Yo tampoco lo acabo de tener claro, ni en Bécquer ni en Víctor Jiménez.

CB dijo...

En poesía, la unidad es el poema, pero el libro forma una unidad superior que compone otro poema, un poema de poemas, algo así como lo de la nación de naciones.
Según se ordenen los poemas o se pongan a hablar los unos con los otros, el poema de poemas cuenta una u otra historia, que influye en la interpretación de cada uno de los poemas aislados y puede favorecerlos o desfavorecerlos.
Me parece a mí, no sé, que los poetas son muy conscientes de este asunto, de que con su colocación componen otro poema, ¿no? A veces incluso el mejor. Desde luego que no es un asunto baladí.
Felicidades atrasadas, o en punto según el antiguo santoral, que mi padre toda la vida lo celebró el 15 porque a él nadie le cambiaba el santo de fecha, y mi hijo sin embargo se apunta al 13 y me dice que no me ponga preconciliar. Aquí una a lo que manden. Felicidades pues, que San Enrique te guarde.

Enrique Baltanás dijo...

Gracias, CB, y felicidades al Enrique de la casa. Yo prefería el 15, que era la víspera de la Virgen del Carmen, pero ya me he resignado al 13, total, no soy supersticioso.
Lo del libro poético es complejo, sí, y yo no lo veo claro tampoco. Hay libros muy unitarios, vamos que constituyen un poema, pero otros no. Pero tienes razón en lo fundamental, que es que el poema puede significar algo distinto según lo que le rodee. Por eso los poetas eligen cuidadosamente por lo general la ordenación de un libro.

Anónimo dijo...

A mí también me emociona la poesía de Víctor. Y curiosamente hace un par de años elegí este poema para publicarlo en mi blog, coincidencias blogueras.

Anónimo dijo...

A mí también me emociona la poesía de Víctor. Este poema lo publiqué también en mi blog, qué profesor que acumule muchos trienios podrá dejar de sentirse identificado con él. Coincidencias blogueras.