LA FRASE

"Una vez descartado lo imposible, lo que queda, por improbable que parezca, debe ser la verdad."

Sir Arthur Conan Doyle

miércoles, 31 de diciembre de 2008

Homenaje a los relojes

Hoy debería ser declarado el día internacional del homenaje al reloj. Pasamos de año: cronología, minutería, calendario. Campanadas. Relojes.

Pero el tiempo es el río que nos lleva. Nosotros, los nadadores.

En esa corriente infinita, que Bergson llamaría duración y no tiempo, vivencia y no cronología, mucha suerte a todos.

lunes, 29 de diciembre de 2008

En la muerte de Alberto Fernández Bañuls

Lo más importante ahora:
que Dios lo admita en su Gloria.
Que nosotros lo tendremos
para siempre en la memoria.

(Letra para cantar por soleá).

Coda: querido Alberto, seguimos en contacto.

domingo, 28 de diciembre de 2008

De la invisibilidad del traductor


En el Correo de Andalucía de hoy domingo, reportaje de Alejandro Duque sobre la traducción en Sevilla. Cree uno que la traducción en Sevilla debe de ser como la traducción en Toledo, en Singapur o en Matalascañas, pero, por lo mismo, se plantean las mismas cuestiones. No voy a entrar en el precio de la traducción, que es asunto molesto y deprimente. “Es muy difícil vivir de esto, se hace sobre todo por afición”, se lamenta el bueno de Fernando Rodríguez-Izquierdo, traductor del japonés. Ya digo, no hablemos de esto. Los caballeros no hablan jamás de dinero (en público). Y con esto no quiero decir que Fernando no sea un caballero, sino precisamente que lo es por encima de la media y por lo tanto puede permitirse el lujo de prescindir de las convenciones.

Otra joven traductora, Yolanda Morató, se lamenta de que "en general, uno de los problemas que nos encontramos con más frecuencia es el de la invisibilidad: podemos pasar medio año preparando una edición crítica, y luego sale una reseña y se ignora por completo nuestro trabajo".

Y esto sí que es verdaderamente interesante, el tema de la invisibilidad del traductor. Anda uno leyendo estos días Bartleby y Compañía, lo primero que lee -mea culpa, mea culpa- de Enrique Vila-Matas. Y se me ocurre si no será el traductor una clase especial de bartleby, es decir, alguien que no ha renunciado a escribir, pero siempre que sea por boca de otro. Una especie de ventrílocuo. ¿O habrá traductores bartlebys y traductores no bartlebys? ¿Traductores que quieren dejarse ver y traductores que prefieren pasar desapercibidos?

No sé, es todo tan complicado... y, todavía más, como para resolverse en un blog, así, de un plumazo o de una entrada. Yo, desde luego, aquí lo dejo.

sábado, 27 de diciembre de 2008

Biblioteca del exilio

El peor favor que se le puede hacer a las mujeres que escriben es agruparlas en el gueto de las antologías de mujeres, de las colecciones de mujeres, de los premios exclusivamente para mujeres. Mal asunto si sólo interesa tu sexo, y no tu poesía o tu novela. Mala cosa si el sexo tapa el verso.

Igual ocurre con la llamada "literatura del exilio".

Mire usted, de eso hace ya mucho, y quien no se ganó un puesto por su escritura no se lo va a ganar por su exilio. Real, fingido o... inexistente. Que esto del exilio es muy complicado.

No se es mejor escritor por haber estado desterrado. Ni peor, claro.

Aunque, ahora que lo pienso, el único verdadero exilio que existe, en literatura, es el olvido.

domingo, 21 de diciembre de 2008

En español

Parece que el editor se ha hecho eco de algunos comentarios sobre la primera edición, y el calendario ya no se llama este año de "la poesía española", sino de "la poesía en español".

Lo abre, el uno de enero, Jorge Luis Borges. Y lo cierra, el treinta y uno de diciembre, José María Valverde.

Para el día de Navidad, este poema de Gerardo Diego, que copio (ya que las musas han dado en darme últimamente la espalda) y con él os felicito a todos los que habitual u ocasionalmente os pasáis, o paséis, o paseéis, por aquí:

¿Quién ha entrado en el portal,
en el portal de Belén?
¿Quién ha entrado por la puerta?
¿Quién ha entrado, quién?

La noche, el frío, la escarcha
y la espada de una estrella.
Un varón -vara florida-
y una doncella.

¿Quién ha entrado en el portal
por el techo abierto y roto?
¿Quién ha entrado que así suena
celeste alboroto?

Una escala de oro y música,
siostenidos y bemoles
y ángeles con panderetas
dorremifasoles.

¿Quién ha entrado en el portal,
en el portal de Belén,
no por la puerta y el techo
ni el aire del aire, quién?

Flor sobre impacto capullo,
rocío sobre la flor.
Nadie sabe cómo vino
mi Niño, mi amor.

viernes, 19 de diciembre de 2008

Oír la luz

Aquí os dejo esta entrevista con Eloy Sánchez Rosillo sobre su libro Oír la luz.

"La poesía debe tener emoción; si no te conmueve es una poesía de segundo orden." Dice entre otras cosas AQUÍ.

sábado, 13 de diciembre de 2008

Dilema bloguero

¿Leer? ¿Escribir?

Como casi todos, éste es también un falso dilema.

Pero hay un punto, en el espacio, en el tiempo, un momento, un lugar, en el que el dilema es verdadero.

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Una entrevista en el diario YA

Recientemente, el diario YA, una cabecera histórica, ha reaparecido, aunque en formato digital (y no sé porque he escrito "aunque"). AQUÍ tenéis una interesante entrevista que le hacen a los historiadores Stanley Payne y Jesús Palacios con motivo de la aparición del libro "Franco, mi padre" en La esfera de los Libros.

sábado, 29 de noviembre de 2008

Del evangelio según san Lukàcs

Yo nunca creí que la obra de Georg Lukács fuese un evangelio para nada, aunque durante mucho tiempo fui devotísimo suyo, y aún siento cierta querencia por el personaje y por su obra. Pero, a diferencia del que acuñó la frase (dirigida contra los novelistas del realismo social) de "el evangelio según san Lukàcs", que fue, si no recuerdo mal, don Juan Benet, yo sí que me leí las obras completas (o casi) del judío-comunista-húngaro (combinación explosiva), traducidas en España por Manuel Sacristán en la editorial Grijalbo. De ellas me interesaron especialmente su Estética y sus ensayos de crítica literaria.

No voy a meterme en fárragos, porque hoy no estoy para fárragos. Sólo un pequeño detalle, un mínimo recuerdo (caprichos de la memoria). Decía Lukács, no sabría decir ahora dónde, que los buenos novelistas no describían jamás el acto sexual en sí porque, aducía, eso es algo puramente animal, indiferenciado, común a todos, y que no revelaba ninguna característica o rasgo peculiar del personaje. Ni su psicología, ni su forma de ser o de pensar... ni propiamente su relación con el otro. Así que había que resolverlo mediante la elipsis. No por razones morales, sino propiamente estéticas y literarias.

¿Llevaba razón Lukács? Pues no sé.

miércoles, 26 de noviembre de 2008

El último crucifijo está en mi casa

Estudié en el mismo Instituto donde después fui, soy, profesor. He visto tantos cambios y mudanzas... y tanto casos que recordar no quiero... Al principio, por ejemplo, había una capilla, que hoy ha quedado convertida en almacén. O un magnífico teatro, que hoy es "salón de usos múltiples", que es otra forma de nombrar la nada.

Cuando estudiaba, en cada aula había un crucifijo. Luego, no recuerdo cuándo, porque yo falté un tiempo de ese Instituto por otros trabajos en que anduve comisionado, los crucifijos fueron desapareciendo. En algún momento creo que llegó a haber un retrato de SS. MM. Ya no, ni eso. Tampoco hay ya tarima o estrado para el profesor: todos tenemos que estar al mismo nivel, incluso físico, o empezando por lo físico y terminando por lo patafísico.

Por la sala de profesores anduvo rodando uno de aquellos crucifijos descolgados de las aulas. Estaba finalmente posado sobre un mueble, cogiendo polvo, sin que nadie le hiciera el menor caso. Se trataba de un crucifijo de metal, de estilo, digamos, para entendernos, "postconciliar".

Un día decidí llevármelo a mi casa, sin consultar con nadie, y allí lo tengo, en una de las paredes de mi despacho. Yo lo llamo el "Cristo de las Catacumbas". Aunque mejor se estaría, quizás, llamarlo el Santísimo Cristo del Abandono y de los Olvidos.

La verdad es que nadie parece haberlo echado en falta. Al menos, en las reuniones del claustro nadie lo ha mencionado. Bueno.

domingo, 23 de noviembre de 2008

Capitalismo salvaje

Es extraño, no conozco ningún país, ninguno, donde haya existido y menos aun exista ese "capitalismo salvaje" del que tanto hablan. En cambio, de "socialismo salvaje" podrían ponerse decenas de ejemplos. Y muchos de ellos, de rabiosa (nunca mejor dicho) actualidad. De los "realmente existentes", vamos.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

Péguy y los sacramentos


Marcel, el hijo primogénito de Charles Péguy, escribió varios libros sobre su padre. Uno de ellos es éste, El destino de Charles Péguy, y en él escribe que la conversión de su padre no supuso un retorno a la Iglesia y a sus normas y prácticas, sino un cambio desde la metafísica platónica a la filosofía de Cristo. Marcel afirma y defiende una distinción entre cristiandad e Iglesia:
"Aquellos que creen en la metafísica cristiana pertenecen a la cristiandad. Aquellos que, además, se someten a la Iglesia, pertenecen a esta Iglesia. Desde la época en que escribía su Juana de Arco, mi padre había establecido esta distinción. Había observado que si los jueces de Ruán podían muy bien excluir a Juana de la Iglesia (negándole la comunión, rechazando incluso oírla en confesión), ningún poder humano podía excluirla de la cristiandad. Es cada hombre por sí mismo quien decide de su pertenencia o de su exclusión de la cristiandad."
El asunto tiene sin duda un largo recorrido teórico, pero, en el caso de Péguy, tiene una base práctica, una raíz biográfica.

Socialista y ateo, Péguy se casó con una mujer socialista y atea como él, si no más, Charlotte Baudouin. Una vez "convertido", se le planteó un problema práctico: su matrimonio civil no tenía ninguna validez canónica y, canónicamente, no era más que un amancebamiento. Sus hijos tampoco estaban bautizados.

Un día Jacques Maritain, sabiendo perfectamente que Péguy no estaba en ese momento, se presentó en su casa para convencer a su mujer de que se bautizara y se casara por la Iglesia. Cuando se enteró, Péguy rompió definitivamente su amistad con Maritain. También hubo (no recuerdo ahora quién) quien propuso a Péguy que se separase de su esposa, posibilidad sobre la que el poeta no quiso ni oír hablar.

Un año después de la muerte de Péguy en el campo de batalla, su esposa y sus hijos solicitaron el bautismo.

domingo, 16 de noviembre de 2008

Todo se soluciona con el tiempo (¡ja!)

Ordenando viejos libros que hacía tiempo no visitaba, de uno de ellos cae un papelito de color ya pajizo. Es una ficha escrita con mi letra (¡cuánto cambia la letra con los años, casi tanto como nosotros mismos!), una cita textual:
"La escuela adolece hoy de un grave mal: enseña muchas asignaturas, proporciona mucha ciencia infusa, informa (en mi opinión, bastante mal), pero no forma. No enseña ni siquiera a leer bien y con gusto (por eso en gran parte se está perdiendo el hábito de la lectura), y mucho menos a escribir bien. Y en ello me parece que reside el mal más grave, porque leer y escribir es el único fundamento del saber y del pensar."
Y al final de la cita, todos los datos: autor, título, lugar de edición, fecha, número de página...:

Ángel ROSEMBLAT, La primera visión de América y otros ensayos, Caracas, Ministerio de Educación, 1969, col. "Vigilia", p. 257.

Y ahora, después de copiarla aquí, y antes de devolver la ficha al libro en que dormía, me vuelvo a fijar en la fecha del ensayo de Rosemblat, ¡1969! Para que luego digan algunos que todas las cosas se solucionan con el tiempo.

lunes, 10 de noviembre de 2008

Maneras de estudiar literatura

En su último artículo en ABCD, José Luis García Martín habla del libro de cierta profesora, y concluye:

"Ella no hace juicios de valor. Lo suyo es el puro rigor científico, o lo que entiende por tal: descuidado mecanicismo acrítico."

Descuidado mecanicismo acrítico. Exacta descripción de lo que hoy se hace, mayormente, en nuestras universidades. ¡Pero y aunque fuera cuidadísimo!, añadiría yo. Entonces, peor todavía.

sábado, 8 de noviembre de 2008

Las maldades de Jacinto Benavente

Jacinto Benavente no es precisamente hoy un valor en alza en la bolsa literaria. Pero en su obra siempre se encuentra algo interesante. De su libro ¡Palabras, palabras...!, libro de aforismos, escojo los que más me han llamado la atención (lo de Maldades... no es porque me parezcan malos, sino por el tono cínico, escéptico y desengañado de la mayoría):

Como los explosivos que parecen un juguete, las verdades más peligrosas son las que parecen mentira.

*

Conviene dejar al morir algunas deudas incobrables, para que alguien nos llore con sinceridad.

*

La cultura puede improvisarse; la educación no se improvisa.

*
Podéis dar al pueblo toda clase de libertades; él se encargará de perderlas.

*

El que sólo es notable en un rincón del mundo, quisiera que aquél rincón fuera todo el mundo. ¿No es verdad, oh regionalista?

*

Si la historia de la literatura española se escribiera a gusto de don Miguel de Unamuno sería lo más fácil de aprender: antes de él, nadie; después de él, nada.

*

No hay nada que se parezca a un hombre tonto como una mujer sabia.

*

La mujer es superior al hombre, considerada por sí misma; pero inferior al perro, considerada como compañera del hombre.

*

¿Llegaste a la cumbre? Estás solo y tienes frío.

*

Para hacernos amar no preguntemos nunca: ¿Eres feliz? Digamos siempre: ¡Qué feliz soy!

*

Aun más difícil que un cariño es encontrar un odio desinteresado.

*

Si queréis engañar a vuestra mujer sin disgustarla, procurad que sea con alguna amiga suya que tenga fama de virtuosa.

*

No incurráis nunca en la tontería de decir a vuestra mujer que estimáis en más su virtud que su belleza, porque os exponéis a que ella os demuestre que hay todavía quien estima en más su belleza que su virtud.

*

Ilustrar a las clases populares es como barnizar la madera de pino. La madera no gana gran cosa, pero sí los expendedores de barnices.

viernes, 31 de octubre de 2008

Notas de clase

Enseñar es mi manera de aprender.

*

¿Nuevas tecnologías? Sí, pero cuidado con que no sean, en realidad, nuevas tecnologías de perder el tiempo.

*

Primer día de curso. Me siento como Adán el sexto día de la Creación. El mundo es aún joven y desconocido. Y siempre da un poco de miedo.

*

El hermoso peligro de unos ojos en la segunda bancada me hace leer los poemas de amor con cuidada frialdad, con más explicaciones eruditas, como atrincherado en los alambres de espino de la filología.

*

El peor alumno, para mí, es aquel al que le importa muy mucho aprobar y muy poco saber. Este tipo de alumno, sin embargo, y por fortuna, es poco frecuente. De hecho, yo nunca me he encontrado con ninguno.

*

Si no me divirtiera en clase, buscaría otro trabajo. Es decir, buscaría un verdadero trabajo.

*

Amor y pedagogía. Ése podría ser el lema del magisterio. Pero se sobreentiende que no es precisamente amor... a la pedagogía.

*

Evaluaciones: ovulaciones.

*

Enseñar es enseñarse. Si es verdad que todo saber es personal, toda enseñanza es subjetiva, intransferible e incontrolable.

*
"Elogio del suspenso". Habría un día que escribirlo. No nos pronunciamos, nuestro juicio sobre alguien lo dejamos en suspenso. Hasta mejor ocasión. Por eso el suspenso no debería llevar nunca nota numérica.

*

Siempre habrá clases.

jueves, 30 de octubre de 2008

Las paradojas del divorcio

Uno de los aspectos más paradójicos del divorcio es quizás que aquellos que pretenden liberarse del yugo conyugal entreguen luego su vida más íntima al arbitrio de jueces, abogados y fiscales, o sea, en definitiva, al del Estado, y al de los demás.
No, el divorcio no es la libertad; es el acatamiento de una sentencia. El pacto conyugal es privado, íntimo, libérrimo; el divorcio hace que el Estado entre un poco más en tu vida.
O así lo veo yo.

lunes, 27 de octubre de 2008

Francisco Machado, el carcelero bueno


Sobre Francisco Machado Ruiz encontraréis un artículo reciente en "La Crónica de León", AQUÍ

Por cierto que, tras la Guerra Civil, Francisco sufrió un expediente de depuración, como todo funcionario que hubiese servido en "zona roja", en la que él efectivamente estuvo, pero no se le encontró nada condenable y se reincorporó con toda normalidad a su cargo de funcionario de prisiones hasta su jubilación. Memoria histórica.

lunes, 20 de octubre de 2008

La lluvia en Sevilla

Los profesores de español para extranjeros hacían repetir a sus alumnos la frase "la lluvia en Sevilla es una maravilla". Por lo visto, era un magnífico ejercicio para aprender a pronunciar la elle. Pero, sí, la lluvia en Sevilla es una maravilla. Como lo es la nieve en Granada, el sol en Rota o el frío en la Sierra de Aracena. La lluvia en Sevilla es, en los últimos tiempos, un huésped insólito, una cosa rara, un don de Dios en esta época en que Dios -por alguna razón- se prodiga muy poco. Esos letreros de "hasta aquí llegó el agua el año tal", esas fotografías de barcas por la Alameda de Hércules, esas riadas de otros tiempos ya son definitivamente eso, cosa de otros tiempos. Ahora la lluvia cae con más mansedumbre, más esporádicamente, más muy de vez en cuando. Como tímida. Pero, cuando cae, lo que se dice caer, varios días seguidos, y no un visto y no visto, la lluvia en Sevilla, se mire por donde se mire, es una maravilla.
Por descontado que trae incomodidades, atascos, percances (como el de ese motorista que resbala y cae por mor de la película grasienta y húmeda que se ha ido formando sobre el asfalto). Pero qué alegre sonido el de las gruesas gotas golpeando los adoquines con fuerza. Qué alegría mirar al cielo y verlo encapotado, plomizo, negruzco, sin una brizna de sol que rompa la armonía de los grises. Cuando, en medio de la calle, nos sorprende un chaparrón súbito, un no sé qué de aventura embarga nuestro ánimo, porque nos sentimos, a pesar de nuestras tecnologías y nuestros inventos, como el hombre de tiempos remotos, al albur de las incidencias naturales, a merced de los elementos. Desprevenidos, sin paraguas, vestidos de secano, ¿dónde nos cobijaremos? Con un poco de suerte, habremos corrido hasta los soportales de la calle Alemanes o de la plaza del Salvador. Y desde allí veremos la cortina de agua -a ratos densa y tupida, a ratos fina y menuda- caer con misericordia sobre los caballos, sobre las palomas, sobre las fachadas, sobre las espadañas y los arbotantes, sobre los transúntes apresurados. Un manto de agua cae sobre la ciudad, húmeda y chorreante, con cristales de luz por todas partes. Los días de lluvia son días alegres para todos -para los colegiales, para los aceituneros y hortelanos, para los poetas y los oficinistas..-, menos para los albañiles que a lo mejor pierden el jornal o las amas de casa que no saben dónde tender la ropa de la colada. Si será dura y larga la seca que venimos padeciendo que ya, hasta los presentadores de la sección meteorológica de los informativos se han acostumbrado a decir que se aproxima el buen tiempo cuando una borrasca gruesa amaga por el Atlántico.
Lo que uno teme es que la lluvia no dure mucho, que el sol vuelva a castigarnos con su luz deslumbrante, cegadora y terrible. Pero, en fin, mientras llueve, los ojos descansan, los campos se empapan, los pantanos se rehacen, el aire se limpia, el polvo se diluye, los ríos corren, los charcos divierten a los niños y desesperan a sus madres. Mientras llueve dura la maravilla. Y la maravilla es fugaz, es lo que se sale de la norma, lo que dura poco. Así que mientras llueve gocemos de esta maravilla que es, sin duda, y como saben bien los fonetistas, la lluvia en Sevilla.

(De un artículo antiguo, quizás de 2000, y creo que inédito, pero que viene bien ahora, cuando hay lluvia en la calle y sequía en mi cabeza).

martes, 14 de octubre de 2008

Estos son los poetas

... no del siglo, no del milenio, no, sino los que podremos leer, un poema por día, en el Almanaque de la poesía española 2009: véase AQUÍ.

lunes, 13 de octubre de 2008

El progreso de la pintura

















Una exposición, la enésima, que se celebra en París, esta vez con el título de "Picasso et les maîtres". Arriba, un óleo de Delacroix, "Las mujeres de Alger en su apartamento"; abajo, la "versión" del malagueño. Del siglo XIX al siglo XX. O sea, del progreso en la pintura.

domingo, 12 de octubre de 2008

John MacCain es de izquierda

Sí, me he dado cuenta al ver por televisión el segundo debate entre los senadores Obama y MacCain. Este último !es zurdo! (Observé que tomaba notas con su mano izquierda). Por lo menos, algo tiene de izquierda. Ahora, lo que no sé si es lo único. Por algo habrá elegido a Sarah Palin.

miércoles, 8 de octubre de 2008

Duda portuense



Una terrible duda corroe mis noches e inquieta mis días.

Cómo debe escribirse el título de la famosa comedia de los Machado, la de La Lola:

a) La Lola se va a los puertos.

b) La Lola se va a los Puertos.

c) La Lola se va a Los Puertos.

d) La Lola se va a Los puertos.

Sí, ya sé que es una angustia ridícula de dómine filológico... pero, ¡socorredme, portuenses (e incluso portuarios)!

martes, 7 de octubre de 2008

Oído en el museo

-"Yo a Picasso no lo trago ni en pintura. .."

(Lo que ahora no recuerdo es si el museo era real o soñado).

lunes, 6 de octubre de 2008

Los demasiados blogs

Gabriel Zaid perpetró un ensayo excelente, valga la paradoja, con el título de Los demasiados libros. A pesar de considerarlo excelente, como digo, no comparto su tesis malthusiana. Ahora el mismo Zaid podría escribir una continuación de aquel ensayo y titularlo Los demasiados blogs. O quizás no haga falta, porque ya esa tesis circula con insistencia.

En el magnífico número tres de la revista Paraíso, que dirige Juan Carlos Abril, encuentro un artículo de Juan de Dios García titulado "Revistas digitales de poesía en lengua española", que además de las revistas habla también de los blogs y de la blogosfera, que ve como "un cajón de sastre tan atractivo como monstruoso". La conclusión es descorazonadora: "Casi todo el mundo escribe. Casi todo el mundo publica en internet. Casi nadie lee a nadie".

miércoles, 1 de octubre de 2008

lunes, 29 de septiembre de 2008

Un nuevo curso



Veni, Creator Spiritus, mentes tuorum visita. Imple superna gratia quae tu creasti pectora
Qui diceris Paraclitus, Altissimi donum Dei, fons vivus, ignis, caritas, et spiritalis unctio.
Tu septiformis munere, digitus paternae dexterae, tu rite promissum Patris, sermone ditans guttura.
Accende lumen sensibus, infunde amorem cordibus, infirma nostri corporis, virtute firmans perpeti.
Hostem repellas longius, pacemque dones protinus, ductore sic te praevio, vitemus omne noxium.
Per te sciamus da Patrem, noscamus atque Filium, teque utriusque Spiritum credamus omni tempore.
Deo Patri sit gloria, et Filio qui a mortuis surrexit, ac Paraclito in saeculorum saecula. Amen

sábado, 27 de septiembre de 2008

Una semana para oír la luz

Ayer, en mi domicilio del pueblo, encontré un aviso de correos. Procedencia: Tusquets Editores. Enseguida me imaginé, y me alegré por, de qué se trataba. Así que fui corriendo a la oficina de correos (en realidad fui rodando lentamente entre los atascos) a recoger el paquete. Por desgracia, el funcionario me informó de que, siendo el aviso del mismo día, no podría recogerlo hasta el siguiente. Pero no volveré por el pueblo hasta el viernes de la semana que viene. Así que tendré que esperar una semana para oír la luz. Schade.

De la W a la G, o de Lima a Sevilla

Iguasaki: famoso escritor peruano disertando en su tertulia sevillana.

martes, 23 de septiembre de 2008

Zubiri y los idiomas: dos anécdotas

Zubiri, que manejaba varias lenguas vivas y muertas, incluido ¡el sumerio!, nunca llegó a dominar el inglés hablado. Lo cuenta Carmen Castro, su esposa, hija de don Américo, en su Biografía de Xavier Zubiri: cuando visitaron los Estados Unidos, en 1946, Zubiri "supo también que nunca iba a ser capaz de hablar inglés, que tuvo desde entonces por lengua muerta: se leía pero no se pronunciaba, ni se comprendía de oídas."

Otra anécdota. En 1921 tuvo que examinarse de griego en la Universidad Central. Relata CC:
"Y lo grave era que ese Xavier, que yo conocí diez años más tarde leyendo griego para su deleite personal, apenas si lo sabía entonces. Pero X siempre tenía suerte. Todavía resultó que un compañero suyo de exámenes todavía sabía menos griego que él. Ese compañero se llamaba Antonio Machado, y por aprobarle no tuvo el tribunal más remedio que aprobar a X."

[Carmen Castro, Biografía de Xavier Zubiri, Málaga, Edinford, 1992, p. 76]

lunes, 22 de septiembre de 2008

El eterno retorno

Esto de los blogs tiene estas cosas. Una vieja entrada, exactamente la segunda que hice en éste, del mes de abril de 2004, El desmayo lingüístico de Manuel Fraga, recibe ¡ahora! un nuevo comentario.
Será que en los blogs el pasado no existe. Que todo, al mismo tiempo, está, siempre, presente. ¿Cómo en la eternidad? No creo, pero...
Por cierto, gracias, Anónimo.

Papel de plata

Ay, el papel de plata. Ese que cubría las tabletas de chocolate. Ese con el que formábamos los ríos y cascadas y lagos del Nacimiento.
Pues ahora, en la cocina, al abrir el envase del rollo, reparo en que se llama "papel de aluminio".
Adiós, metáfora.

La venganza de Darwin

Así se titula un interesante y breve artículo de Manuel Morales do Val en Periodista Digital. Proporciona una noticia sobre Inglaterra y otra sobre el Vaticano. La del Vaticano, en marzo. Para leerla, pinchar AQUÍ.

domingo, 21 de septiembre de 2008

La metáfora de la tarta

[El cambista y su mujer, de Marinus Claeszon van Reymerswaele, 1539, Museo del Prado]

La gente suele pensar con metáforas, acertadas unas, equivocadas otras. Una de las más populares, y de las más erróneas, referida a la economía, es la de la tarta. Según la cual la economía sería como una tarta que se reparte. Por ejemplo, muchos creen que es bueno que los trabajadores se jubilen, porque así dejarán un puesto libre que podrá ser ocupado por un trabajador joven. O que hay que quitarles a los ricos una parte al menos de su abundante porción para dársela a los pobres, a los que les ha tocado una porción de la tarta bastante más raquítica.
Pero una tarta, cuando sale del horno, ya es un producto acabado, finito, completo. Si nos comemos media tarta, ya sólo quedará la otra media.
Sin embargo, la economía no es una tarta. La riqueza crece o disminuye: nunca es una magnitud estática, un algo completo o acabado. Algo que ya ha salido del horno para siempre.
La gente no se para a pensar que el puesto de un trabajador que se retira bien puede ser amortizado, sin que se reemplace al jubilado. O que si les quitamos mucho a los que tienen más, tal vez ya no les interese emprender nuevas empresas o trabajar más y se marchen a otros lugares donde no los frían a impuestos.
La economía no es una tarta, sino una forma de entender la vida. De entenderla tal y como es o como querríamos que fuese. O como nos imaginamos que es.
Por eso la primera asignatura que debe estudiar un economista es la antropología.
Si no se sabe qué es el hombre difícilmente se entenderá cómo y por qué se busca la vida.
La economía no es una tarta, es un tortazo que la realidad suele dar (como ahora) a ciertos demiurgos petulantes que creen poder fabricar a su antojo en su obrador el pastel con el que sueñan.

Iwasaki, en ABC

Los elogios nunca se merecen. Pero siempre se agradecen.

sábado, 20 de septiembre de 2008

Desde fuera

Hoy se ponen de acuerdo los dos principales suplementos, tanto Babelia como ABCD, en reseñar Desde fuera, el espléndido nuevo libro de Álvaro Valverde. Firman las reseñas, respectivamente, Antonio Ortega y Luis García Jambrina. La mía aparecerá en Clarín antes de que acabe el año. No habrá sorpresas: también será elogiosa.
Ya sé que la unanimidad es sospechosa, pero toda regla tiene su excepción.

viernes, 19 de septiembre de 2008

Ay, la cabeza

Lo propio del volatinero es que tenga la cabeza a pájaros.
Ay, qué ruido, qué gritería.

lunes, 15 de septiembre de 2008

Agua

Me gusta verla correr,
y meditar en su espejo,
que se abraza y me devuelve
la luz que baja del cielo.

sábado, 13 de septiembre de 2008

Arturo Serrano Plaja, entre el Soviet y el Cristo


El caso de Arturo Serrano Plaja (San Lorenzo de El Escorial, 1909-Santa Bárbara, California, 1979) es el de un poeta que consiguió una proeza que son dos. Durante la guerra civil publicó el mejor poema marxista de la literatura española, El hombre y el trabajo (1938) y, años después, en 1965, con La mano de Dios pasa por este perro, el poema cristiano menos empalagoso de una época y de un país en que la poesía religiosa estaba tan confitada de almíbares, por no decir que de agua bendita y olores a alcanfor de sacristía.

Si El hombre y el trabajo lo rescató en 1978 Francisco Caudet en una edición facsímil —con los dibujos de Ramón Gaya—, no sucedía lo mismo con el resto de la producción de Serrano Plaja. Ahora, Serge Salaün y José Ramón López García —este último se encarga además del estudio introductorio— nos ofrecen una cuidada edición de la producción poética de Serrano Plaja desde 1939 hasta 1970, incluyendo no sólo los libros publicados (Versos de guerra y paz, Galope de la suerte, La mano de Dios…, Los álamos oscuros) sino una abundante addenda de poemas sueltos e incluso inéditos.

Si el conjunto de esta poesía no es, en absoluto, desdeñable, no es, con todo, más que la constelación de los dos libros centrales de Serrano Plaja, El hombre y el trabajo y La mano de Dios pasa por este perro.

De El hombre y el trabajo hablaron elogiosamente Octavio Paz, Antonio Machado, Rafael Alberti o María Zambrano. El prestigio del libro sigue intacto, aunque quizás no sea muy leído hoy en día, y Víctor García de la Cocha, en La poesía española de 1935 a 1975, lo considera “uno de los mejores libros de poesía de nuestra guerra”. Pero la importancia de El hombre y el trabajo excede la coyuntura de la guerra. Frente a tanto poema de agitación y propaganda bélica y política (algo en lo que, por lo demás, también, comprensiblemente, incurre Serrano Plaja, tanto aquí como en otros libros), El hombre y el trabajo es un poema reflexivo y trabado, que remonta las circunstancias concretas de la guerra para incardinarse en una concepción del mundo y de la vida que no es otra que la teoría marxista del hombre nuevo. No es por ello un libro discursivo o doctrinal, sino, y ahí está su valor, plástico y emotivo. El Trabajo, la Libertad, el Amor son, al decir de María Zambrano, los tres ejes en que se articula este gran fresco épico con personajes colectivos, los oficios, pero también con protagonista individual.

Terminada la guerra, Serrano Plaja comenzó un largo exilio por Francia, Chile, Argentina… hasta recalar finalmente en Estados Unidos, donde alcanzaría el puesto de catedrático en la Universidad de California en Santa Bárbara. En 1967 viaja a España y obtiene el pasaporte español, pero “desengañado con la sociedad que encuentra”, dice José Ramón López García, decide volver a Estados Unidos. Como López García no aporta ningún dato, podemos imaginar que los motivos de su regreso a América pudieron muy bien ser otros: un consolidado puesto académico en Estados Unidos frente a un difícil acomodo laboral en España. En todo caso, cuando se jubiló pudo instalarse en España —ya había muerto Franco—, pero decidió quedarse en California, donde murió. Quien empezó siendo, ciertamente, un exiliado, terminó por ser un señor español que trabajaba y vivía en el extranjero.

Serrano Plaja se había ido por estos años alejando paulatinamente del comunismo, tal vez impresionado por el discurso de Kruschov ante el XX congreso del PCUS o la posterior represión soviética en Hungría, tal vez, también, cabe apuntar, por la prosperidad del american way of life que tenía ante sus ojos. Su ruptura teórica y definitiva con el comunismo la plasmaría en su ensayo “Arte comprometido y compromiso del arte” (1960). Ya, por otra parte, colaboraba regularmente en España con Papeles de Son Armadans, Cuadernos Hispanoamericanos, Ínsula, Poesía Española…

¿Fue su desengaño político lo que le llevó a abrazar el cristianismo? Aunque alguna parte pudo tomar tal decepción, el salto es demasiado grande y además innecesario. Se puede cambiar de punto de vista político sin que ello entrañe mayores consecuencias de tejas para arriba. La conversión, creo que podemos llamarla así, de Arturo Serrano Plaja, tenía raíces algo más hondas que la política, y se situaba en un plano existencial y vivencial. Se trataba, en definitiva, del sentido de la vida y de la muerte, esa pareja extraña que nunca se separa. Era el mismo problema que le había preocupado en El hombre y el trabajo. El poeta lo expresará en unos versos de La mano de Dios…, su segunda proeza poética: “morir es la derrota/ si no hay Dios/ da vergüenza morir y más de noche/ morir sólo de pena de noche da vergüenza/ da pena de morir solo de noche/ sólo morir de pena/ de morir da vergüenza/ de cosa indecorosa/ de vida ya indecente/ si no hay Dios/ da vergüenza morir sólo de muerte.”

López García insiste machaconamente en la “temática religiosa heterodoxa e irreverente” de este libro, aunque ni una sola vez da algún detalle de dónde encuentra lo heterodoxo o dónde lo irreverente. Extraño sería que una editorial como Rialp (en cuya colección Adonáis se publicó el poemario) consintiese en publicar un libro no ya heterodoxo sino, además, irreverente.

La mano de Dios pasa por este perro parte de un conocido pasaje del evangelio de Marcos (VII, 24-30) en el que una mujer fenicia pide a Jesús la curación de su hija. Jesús, al principio se niega, porque es extranjera y “no está bien echarles a los perros el pan de los hijos”, pero al argüirle la mujer que “también los perros, debajo de la mesa, comen las migajas que tiran los hijos”, accede. El poeta se siente aquí ese perro vagabundo, “ese perro pulguiento”, “lleno de mataduras y miseria/ mas al fin aquí estoy.”

Queda, para el lector, quizás, el dilema de qué Serrano Plaja escoger, si el marxista o el converso. Dilema que no se le presentará al verdadero lector de poesía: el valor de estos dos libros, de los dos, y no sólo de esos dos, sitúa a Serrano Plaja en la primera fila de la poesía española de nuestro pasado siglo XX. Lo paradójico, o quizás no tanto, dada la pereza de nuestra cultura, o nuestra cultura de la pereza, es que aún carezcamos de una biografía suya digna de tal nombre.

De momento, aunque no se comprenda muy bien por qué no se ha aprovechado la ocasión para publicar su poesía completa, aquí está, puesta en limpio, la que escribió durante el exilio, desde 1939. No es poco.

[Publicado en Clarín. Revista de nueva literatura, núm. 73 (2008)]

jueves, 11 de septiembre de 2008

Sólo quedó uno

En los diarios de guerra en el Madrid republicano (España sufre, editorial Renacimiento, 2008, prólogo de Andrés Trapiello) de Carlos Morla Lynch, puede leerse (anotación del cinco de agosto del 36):
"Hace días los periódicos publicaron un manifiesto firmado por los más excelsos intelectuales: Gregorio Marañón, José Ortega y Gasset, Pérez de Ayala, Marichalar, Juan Ramón Jiménez, Antonio Machado, etc., protestando de la rebelión y colocándose resueltamente al lado del Gobierno".
Fijémonos en los nombres de estos "excelsos intelectuales". De la lista que da Morla, sólo uno se quedó en España, en el bando republicano. Y todos, excepto Juan Ramón, salieron echando pestes de aquella República. Jiménez permaneció fiel a la idea republicana, pero a la debida distancia, porque acercarse a la fiera resultaba peligroso, como pudo comprobar por él mismo en el Madrid miliciano.
Tampoco estaban Baroja, ni Azorín, ni por supuesto Unamuno o Eugenio D'Ors...
Sólo quedó, les quedó, uno: Antonio Machado.

martes, 9 de septiembre de 2008

Sueños

Esta noche he soñado con aviones de ultimísima tecnología, tanto militares como civiles.
Las cosas que se sueñan cuando no se tiene con qué soñar.

domingo, 7 de septiembre de 2008

El extraño episodio de Emaús

[Velázquez, La cena de Emaús]

Los libros se escriben para arrojar, o intentar arrojar, alguna luz. Se parte de un enigma para aclararlo; de un problema, para resolverlo; de unos hechos, para resumirlos o establecerlos... También es legítimo decir: miren ustedes, esto es lo que NO sabemos, lo cual equivale a trazar una frontera entre la luz y las sombras, o sea, cuánto y qué sabemos y cuánto y qué ignoramos.
Francisco Morales Padrón, catedrático de Historia de América, ha publicado recientemente un libro titulado Jesús de Nazaret. Realidad y fabulación (Sevilla, Renacimiento, 2008), sugerente y bien escrito, pero del que, por momentos, no sabemos muy bien qué pensar.
Veamos, por ejemplo, el capítulo "El extraño episodio de Emaús".
"El relato -comienza por decir nuestro autor- es tan bello como el de la Samaritana. Si el episodio del pozo únicamente lo relata Juan, el de los discípulos de Emaús sólo lo refiere Marcos cuyas líneas encierran pruebas convincentes de la Resurrección de Cristo."
Pasemos por alto que no es Marcos, sino Lucas el que refiere este episodio: puede ser una errata o un despiste (porque luego, en efecto, cita a Lucas). Vayamos al meollo, que es la Resurrección de Cristo. ¿Se trató de una Resurrección física o de una Resurrección simbólica? Dice Morales Padrón:
"¿Acaso cuando los discípulos decían que Jesús había resucitado de entre los muertos querían dar a entender que, del mismo modo que Elías había retornado a la vida al ser heredados su espíritu y su misión por Juan el Bautista, también entre ellos mismos habían cobrado nueva vida el espíritu y la fe de Jesús? Desde nuestra ignorancia estamos incapacitados para responder a estas preguntas."
Y aquí es donde el lector da un respingo y dice: "Oiga usted, maestro, y si no sabe, ¿pa qué escribe un libro?"
Sobre la Resurrección de Jesús de Nazareth existe una abundantísima literatura, histórica, filológica, teológica... Porque no es cuestión baladí, sino la piedra angular del Cristianismo. Por lo menos, es lo que dice Pablo en la primera carta a los corintios: "y si Cristo no ha resucitado, nuestra predicación carece de sentido y vuestra fe lo mismo."
¿Acaso no se dice en Lucas: "Mirad mis manos y mis pies: soy yo en persona. Palpadme y daos cuenta de que un fantasma no tiene carne y huesos, como veis que yo tengo."? ¿Y qué tocó Tomás el incrédulo, símbolo o carne?
Bien está que cada cual adopte la postura que crea más honesta y más conforme a la verdad. Pero antes hay que estudiar bien el tema, y no dar por despachado un asunto sin documentarse, argumentar, razonar, rebatir, defender... que es lo que, a pesar de manejar bibliografía, no hace aquí Morales Padrón.
En fin, el libro del profesor está muy bien escrito, y es interesante y recomendable, se lee bien... pero... no se puede despachar de un plumazo, en párrafo y medio, una cuestión tan crítica.
Por lo menos habría que considerar estos dos puntos.
1º.- En los Evangelios se habla siempre de una Resurrección física de Jesús. Y el episodio de Emaús no lo contradice.
2º.- Jesús ha muerto como un fracasado. Sus discípulos (salvo Juan) huyen, se esconden, reniegan... ¿Qué ha tenido que ocurrir para que vuelvan a su misión, para que incluso estén ahora dispuestos a arrostrar el martirio? Sólo la Resurrección puede explicarlo.
(Los judíos dieron otra interpretación: que los discípulos habían robado el cadáver para luego decir que había resucitado... Y otra, los musulmanes: que Cristo realmente no murió en la Cruz, sino que fue llevado por ángeles al Cielo).
Hubiera sido conveniente detenerse algo más en esta cuestiones en un libro que, por lo demás, resulta de muy agradable lectura.

jueves, 4 de septiembre de 2008

Los Machado y la Gran Guerra

Acaba de aparecer el número 2 de la revista Hallali, que dirige Emilio Quintana. Y en el mismo, mi artículo sobre el drama El hombre que murió en la guerra, de los Machado.

miércoles, 3 de septiembre de 2008

Razas

Blanco, blanco, vamos, lo que se dice blanco, yo no he visto nunca a nadie. Claro que negro, o sea, negro, tampoco.

domingo, 31 de agosto de 2008

Uau!



Vayan memorizando este nombre: Sarah Palin.
Dicen que McCain la ha elegido para captar el voto femenino otrora dirigido a la Clinton. Yo creo que lo que va a captar sobre todo es el voto de los varones (heterosexuales, claro).
No entro en debates ideológicos. A uno lo dejaban frío tanto Obama como McCain. Pero, bueno...
Otro día hablaremos de política. Hoy tocan sólo las imágenes.
Que gane McCain... y que dimita pronto.

sábado, 30 de agosto de 2008

Árboles y bibliotecas

Sevilla no es la ciudad de las personas, como reza la propaganda municipal, sino la ciudad de los disparates. Al largo suma y sigue se añade ahora éste del enfrentamiento entre los partidarios de una biblioteca y los defensores de unos árboles. Árboles contra bibliotecas, y viceversa. Parecía imposible. Pues lo han logrado.



Nota: sobre el asunto hay ya bastante "blogografía". Por ejemplo AQUÍ y AQUÍ.

martes, 19 de agosto de 2008

Political correctness

La intolerancia es una cosa muy mala, muy retrógrada, inconcebible... salvo que se llame tolerancia cero. Ah, entonces...

sábado, 16 de agosto de 2008

Tópicos, fórmulas y mentiras


"Los años veinte y treinta significaron, entre otras cosas, la incorporación de las mujeres a la vida cultural e intelectual española, un proceso truncado, como tantos otros, por la Guerra Civil, y que luego, durante el franquismo, sufrió una tremenda inversión o retroceso." Así comienza la reseña de Luis García Jambrina en ABCD a la Poesía esencial de Ernestina de Champourcin, antologada y prologada por Jaime Siles (Fundación Banco Santander, 2008). Un tópico obligatorio, una fórmula manida, pero, sobre todo, una falsedad irritante.

¿No había mujeres en la vida cultural española antes de los años veinte y treinta del siglo XX? ¿Acaso nunca existieron María de Zayas, sor Juana Inés de la Cruz, Ana Caro, Rosa Gálvez, Gertrudis Gómez de Avellaneda, Carolina Coronado, Fernán Caballero, Emilia Pardo Bazán, Concha Espina... en fin, tantas y tantas como podrían citarse? (Que no vamos a hablar ahora de las segundonas, como Antonia Díaz, Mercedes de Velilla, Blanca de los Ríos o Isabel Cheix).

¿Un proceso truncado? ¿Una tremenda inversión o retroceso en el franquismo (sea eso lo que sea, que aún no lo sabemos bien)? Entonces, ¿cuándo escribieron Gloria Fuertes o Carmen Laforet, Eulalia Galvarriato, María Victoria Atencia o Pilar Paz Pasamar? ¿Y Elena Quiroga, Ana María Matute o Dolores Medio? ¿Y Carmen Martín Gaite o Mercedes Salisachs? ¿Y Paulina Crusat, María Moliner o Elena Soriano...?

Luego resulta que, según confiesa el propio García Jambrina, las únicas mujeres que Gerardo Diego recogió en su famosa antología eran Josefina de la Torre y Ernestina de Champourcin. O sea, que tampoco era para tanto eso de los años veinte y treinta... Por lo menos, en cuanto a la poesía.

Y otra perla de la reseña: que la llamada generación del 27 fue "la que trajo a España la modernidad". Vamos, que ni Juan Ramón Jiménez, ni Unamuno, ni Azorín...

Luis García Jambrina, habitualmente inteligente en sus reseñas, ha debido de escribir ésta en la playa, a la hora de la modorra, o con el piloto automático de las rutas más previsibles.

Por cierto, en el próximo número de Clarín saldrá mi propia reseña de la antología de la Champourcin. ¿Diré yo también alguna tontería? Todo el que tiene boca...

[En la fota de la izquierda, Ernestina con su marido, Juan José Domenchina]

sábado, 9 de agosto de 2008

Premisa y corolario

Se ha jaleado mucho la famosa frase de Machado según la cual "por mucho que valga un hombre, nunca tendrá valor más alto que el valor de ser hombre", dicha por Juan de Mairena en los años de la guerra. Pero la frase estaba escrita mucho antes, en la comedia El hombre que murió en la guerra (1928):
«Si Cristo vuelve y nos habla otra vez —le dice Miguel a Guadalupe en la escena VIII del acto III—, sus palabras serán apróximadamente las mismas: “Acordaos de que sois hijos de Dios, que por parte de padre sois alguien, niños”. Traducido al lenguaje profano: “Nadie es más que nadie”. Porque, por mucho que valga un hombre, nunca tendrá valor más alto que el valor de ser hombre.»
Observemos que la última frase no es sino el corolario de una premisa que no puede obviarse. Como dice el propio Miguel de la Cruz, nombre parlante del protagonista de la comedia: "traducido al lenguaje profano". No sería justo ni honrado olvidar cuál es el original de esta traducción.

lunes, 4 de agosto de 2008

La filosofía de Quimo

"Quimo era incapaz de rencor; estaba acostumbrado a renunciar; sabía que en amor lo que más vale es el deseo o la memoria, que la dicha, para serlo, ha de ser pasajera, que hay que sufrir sin resentimiento, que el tiempo lo allana todo."

Aquilino Duque, La linterna mágica (1ª ed.: Barcelona, Plaza&Janés, 1971)

sábado, 2 de agosto de 2008

Bombillas y bombillos

La imaginativa medida imaginada por Miguel Sebastián (para que imagine esas cosas es para lo que se supone que le pagamos el sueldo de ministro) me ha hecho recordar lo que me contó hace tiempo un buen conocedor de la realidad cubana. También allí o, mejor dicho, allí primero, se le ocurrió al Comandante colocar bombillas de bajo consumo en todos los hogares de la isla para remediar la escasez petrolífera, que se volvió pavorosa tras lo de Gorbachov y la perestroika. Y dicho y hecho, que para eso allí no hay oposición. El problema vino luego, cuando había que reponerlas, y el precio de una de esas bombillas suponía casi medio sueldo del sufrido ciudadano cubano. La cosa, desde luego, no se solucionó por las bombillas, sino porque el petróleo de Chávez vino al cabo a sustituir al ya desaparecido petróleo soviético.

¡Exactamente igual que aquí! Bombillas de bajo consumo y petróleo chavista!

La diferencia es que lo que nosotros llamamos bombillas, en Cuba se denominan bombillos.

Pero la tontería es la misma.

Los sueldos, no, claro... Aunque... todo se andará.

domingo, 27 de julio de 2008

El sentido de la historia: una entrevista con René Girard

Los interesados en el autor de la teoría mimética del deseo tenéis AQUÍ una amplia entrevista con R. Girard en seis vídeos. Se habla de Klausewitz, de Hördelin, de Proust, del ballet ruso, de Nietzsche, de Baudelaire... Eso sí, está en francés. ¡Certainement!

lunes, 21 de julio de 2008

La roca y el mapa



T. S. Eliot prefería denominarla como la roca.

Pero G. K. Chesterton la comparaba mejor a un mapa:

"No hay otro caso de institución inteligente continua que haya estado pensando sobre el pensamiento durante dos mil años. Como es natural, su experiencia abarca prácticamente todas las experiencias, y en especial prácticamente todos los errores. El resultado es un mapa en el cual se hallan señaladas con claridad todas las calles cortadas y las carreteras en mal estado, todas las vías que la mejor de todas las pruebas ha demostrado que son inútiles: la prueba de aquellos que las han recorrido."


(en Razones para la fe, Barcelona, Styria, 2008, p. 37. En la foto, con su esposa Francis)

jueves, 17 de julio de 2008

El humor de Riquer


En el crispado y convulso ambiente de la Universidad de los años setenta, una alumna le espetó, no sé si en clase o en una asamblea:

-"Usted es un instrumento de la burguesía".

-"Mire, señorita", le replicó sonriendo Martín de Riquer, "esto es imposible... porque yo soy miembro de la aristocracia."

Era, en efecto, marqués de Benavent y conde de Casa-Dávalos.

lunes, 14 de julio de 2008

Para Bibiana

El día en que hombres y mujeres consigan ser iguales (cosa que a Bibi le parece deseable y perseguible y, por lo visto, conseguible), ¡el mundo será tan aburrido!

Aquel profesor...

Aquel profesor era tan estricto que sus alumnos decían que en sus exámenes no calificaba, descalificaba.

sábado, 12 de julio de 2008

Pérez de Ayala, ¿liberal?


Para mí, vamos, para cualquiera, el liberalismo es una doctrina política que afirma que el Estado debe reducirse a sólo tres competencias (defensa y seguridad, administración de justicia y política exterior) y una doctrina ecónomica que sostiene que la riqueza se crea y se distribuye más y mejor mientras más libres sean los particulares para producir y vender y mientras más se respete, por consiguiente, la libertad de mercado y la propiedad privada.

Pero en España se ha solido confundir el liberalismo con la masonería, el anticlericalismo o el radicalismo.

Intelectuales liberales ha habido en España muy pocos. Y algunos que pasan por serlo no lo fueron en realidad.

Parecía que en Ramón Pérez de Ayala íbamos a encontrar un liberal de verdad, un liberal de libro. Así decía en uno de sus ensayos recogidos en Política y toros:

"Todos los pueblos, en el curso normal de su existencia, ejercitan lo que los ingleses llaman el selfgovernment; se gobiernan, mal que bien, a sí propios, con independencia de sus gobernantes, los cuales son tanto mejores cuanto menos estorban el espontáneo desarrollo de la nación."

Sin embargo, la coherencia no ha sido nunca o casi nunca virtud de intelectuales, al menos por estos pagos, y Pérez de Ayala, pocas páginas más adelante, matizaba o, mejor dicho, contradecía su anterior aserto con este otro:

"¡Igualdad!, ¡Igualdad! Por eso, paradójicamente, la forma más eficaz de abstención del Estado es la intervención."

Y concluía que "era absurda (y así lo ha demostrado la historia) la inhibición del Estado en materia económica y cultural (liberalismo manchesteriano, siglo XIX) sino que su intervención en estos dos hemisferios del contenido político constituye su deber primordial."

Con estos "liberales", ¿para qué necesitábamos socialistas?

viernes, 11 de julio de 2008

La energía potencial

"En el socialismo y en el comunismo está almacenada la energía potencial del futuro próximo."

¿A quién pertenecen estas palabras? ¿A Largo Caballero? ¿A Andrés Nin? ¿A Enrique Líster? ¿A la Pasionaria? ¿A Max Aub? ¿A Rafael Alberti?

No: a Ramón Pérez de Ayala.

Las cita Andrés Amorós en el prólogo de su edición de Tigre Juan y El curandero de su honra (Madrid, Castalia, 1980).

Supongo que esas palabras son anteriores a 1936, pero no demasiado.

Si las copio aquí es por poner otro ejemplo de la enorme fascinación que la idea del socialismo ejerció sobre nuestros intelectuales (Unamuno, Ortega... pero también Chesterton o Péguy...).

Y de esa energía potencial, ¿qué se fizo? Ésa es otra historia.

jueves, 10 de julio de 2008

Del callejero

Al Excelentísimo Señor don José Utrera Molina, cuyas ideas políticas ni he compartido nunca ni probablemente compartiré jamás, pero de cuyo patriotismo y hombría de bien albergo pocas dudas, se le puede quitar la calle que tenía dedicada en Sevilla, ciudad de la que fue Gobernador civil, desde hace muchos años. Como también se la quieren quitar a don José Lora Tamayo y a otros muchos... no se sabe bien por qué ni para qué.

En cambio, las calles dedicadas a los pistoleros de la ETA pueden seguir ahí, incluso con las bendiciones de la Audiencia Nacional.

Que me aspen si lo entiendo.

martes, 8 de julio de 2008

Selecta nevería



Cine, de Alejandro Xul Solar (1921)


Esos poetas herméticos, que provocan la insalivación pavloviana de los filólogos…

*

Góngora: laberintos ajardinados con flores de papel.

*

Escansión: es canción.

*

Los filósofos no valen tanto por su sistema, o sea, por su red, como por los pececillos que logran pescar con ella.

*

Al tiempo que se escapa no hay más remedio que seguirlo.

*

Reciedumbre: una palabra que muchos tienen ya por sinónimo de ranciedumbre.

*

Teología: catedral de palabras.

jueves, 3 de julio de 2008

Conferencias enlatadas

Álvaro Valverde, en su blog, nos da la interesante noticia de que la Fundación Juan March ha colgado ¡dos mil conferencias! que se dieron en la institución. Pinchar AQUÍ, por ejemplo, para escuchar a Trapiello hablando del género diarístico. Pero imagínen el archivo... treinta años de conferencias.
La única pega es que no tiene índice, y uno tiene que probar y buscar.

martes, 1 de julio de 2008

Corran a verlo

Corran a ver el video que ha colgado Carlos RM en su blog Cuaderno de Vísperas.

Es bonito, verdaderamente bonito.

Aunque me temo que los del Proyecto Gran Simio nos van a preparar pronto el Gran León.

lunes, 30 de junio de 2008

Otros tiempos

"El mal es que hablando de hombres decimos, fulano se metió fraile. Y hablando de mujeres decimos, a fulana metieron monja. Como se dice así se hace, que muchas veces, y plega a Dios no sean las más, no entra a ser monja de su voluntad para servir a Dios, sino meterlas sin tener ellas inclinación ni gana de ello, y algunas veces por fuerza, no por otro intento sino, o por que no les pueden casar o por no tener cuidado de mirar por ellas y proveerlas. Lo cual no puede pasar sin gran culpa de quien lo hace y de quien lo aconseja. Y como las que así entran monjas no toman estado por elección de voluntad, el monasterio que es paraíso de deleites a los que voluntariamente entran en él, a las que sin elección propia lo toman, es cárcel aspérrima. No se con qué podrá restituir el que por fuerza mete a su hija monja. Porque le roba libertad que es joya preciosísima."

Fray Domingo de Valtanás, Exposición sobre el estado y velo de las monjas, Sevilla, 1557

[cito por la edición de Guillermo Nieva Ocampo, de la Universidad Nacional del Sur, Argentina, “Servir a Dios con quietud: la elaboración de un modelo regular femenino para las dominicas castellanas a mediados del siglo xvi”, Hispania Sacra, LIX, 119 (2007), pp. 163-196].

domingo, 29 de junio de 2008

Javier Salvago

"Poeta y guionista de Jesús Quintero". Así titula el periódico la entrevista de Alfredo Valenzuela con Javier Salvago. No sabría yo decir si me gustaría que mi amigo Javier pasara a la historia con esa doble etiqueta. Desde luego, al principio me chocó. Porque yo he tenido siempre a Javier por un poeta, un extraordinario poeta, y nada más. Pero luego, bien pensado, no está mal visto. Forma parte, digo, su relación con el Loco, de su biografía y, también de su leyenda, aunque no agote, ni mucho menos, su personalidad.

La entrevista, publicada en Abc de Sevilla, hoy domingo, puede leerse aquí.

viernes, 27 de junio de 2008

Encuestas sobre la docencia

La Universidad de Sevilla me hace llegar lo que "ella" denomina "encuestas de opinión sobre la docencia", correspondientes al curso que termina.

En una asignatura contestan 2 alumnos sobre 116 matriculados. En las otras dos que he impartido, 1 sobre 94, y 1 sobre 73.

Lo de menos, claro está, es el resultado. Porque no tiene sentido planteárselo siquiera con una "muestra" tan escasamente representativa.

Una de las preguntas reza: El Profesor estructura la docencia de forma clara y ordenada....

Y la siguiente: Imparte la docencia de forma clara y ordenada...

¿Cuál es la diferencia?

¿De verdad es esto serio?

¿Por qué responden tan pocos alumnos?

¿Es así como se evalúa al profesorado?

En fin, seguimos a vueltas sobre la excelencia universitaria. Aunque la cosa no tiene vuelta de hoja.

jueves, 26 de junio de 2008

Ya va siendo hora...

Pues sí, ya va siendo hora de poner aquí algo nuevo. Pero entre el final del curso (Selectividad, exámenes, revisiones, reclamaciones, reuniones y burocracias docentes varias) y la calor que se nos ha echado encima, vamos listos.
Bueno, sigan antentos... al Google Reader.

miércoles, 18 de junio de 2008

Sorpresas esperadas

Soñé que le daban este año el Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales a Réné Girard. Cuando me desperté, leí en los periódicos que se lo habían dado a Tzvetan Todorov.
Hombre, dónde va a parar.

sábado, 14 de junio de 2008

Pilar de Valderrama



Una cosa que no deja de extrañarme, en estos tiempos de "feminismo" rampante y boga académica de los gender studies, es que no haya tesinando o profesor o crítico alguno que emprenda la tarea de exhumar y revisar la obra literaria de Pilar de Valderrama, la supuesta Guiomar de Antonio Machado. Que esa obra misma sea tan difícil de encontrar y que nadie la "rescate", operación tan menudeada y socorrida hoy.

Dicen que era una poeta mediocre. Yo ni afirmo ni niego, porque sólo le he leído fragmentos y cosas sueltas, aparte, naturalmente, del Sí, soy Guiomar. Pero, buena, mala o regular, su obra debe de ser muy interesante, y en alguna de sus obras teatrales (El tercer mundo, La vida que no se vive) se encuentran las claves de su especialísima relación intelctual y afectiva con Antonio.

Pero miento: sí hay alguien. Miguel Ángel Baamonde prepara un libro titulado Guiomar. Asedio a un fantasma, del que ha tenido la amabilidad de mandarme una copia en cedé. Leer en la pantalla no es lo mismo que leer en papel, y de momento sólo puedo decir que es interesante y enjundioso. Para dar un juicio definitivo, habrá que aguardar a que el libro se publique.

Aún así, sigo echando en falta más atención a Pilar de Valderrama. Y no sólo por aquello de cherchez la femme.

miércoles, 11 de junio de 2008

La OPEP

En el código penal español, y supongo que en el de otros países también, está tipificado el delito de "conspiración para alterar el precio de las cosas". ¿Y qué sino eso es la OPEP?

Si la demanda crece, cualquier fabricante de cualquier cosa aumenta su producción. Pero la OPEP hace justamente lo contrario. ¿Porque el petróleo es un bien escaso y se puede acabar y hay que racionarlo? Quiá. Petróleo hay para rato.

Más bien hay que mirar al control estatal de la producción en muchos de estos países. A su estructura corrupta y oligárquica (que no excluye, sino todo lo contrario, la demagogia). Ningún país de la OPEP es una democracia.

Y, de otro lado, en los países consumidores, caso de España, a su renuncia a desarrollar la energía nuclear. Y a una política exterior completamente extraviada.

martes, 10 de junio de 2008

Excelencia universitaria


Está de moda el sintagma: excelencia universitaria. A los burócratas universitarios (rectores, vicerrectores, decanos y vicedecanos, bolonios y contrabolonios, expertos de la cosa y cogecosas varios...) no se les cae de la boca. Pero, ¿cómo lograrla? ¿cómo definirla? ¿cómo medirla? Ah, esa es ya otra cuestión. Ahora quieren evaluar a los profesores, e incluso que eso tenga repercusión en el sueldo. Ahora bien, ¿cómo?

La última parida de la USE es que el alumno que lo desee rellena una encuesta por internet. Y esa será la "nota" del profesor. Las preguntas que se plantean son de lo más absurdo, pero es que además se da el caso de algunos profesores en cuya encuesta ha respondido un solo y único alumno, con lo que la objetividad de la evaluación, incluso desde el punto de vista estadístico, es perfectamente descriptible. Además, ni siquiera se sabe si ese alumno era de los que iban a clase o pertenecía al amplio sector de los absentistas.

No le demos más vueltas: la medición de la calidad es sencillamente imposible de hacer en la enseñanza pública.

Una universidad excelente sería aquella que pudiese contratar y despedir libremente a los profesores. Y admitir o expulsar a sus alumnos de manera igualmente libre.

O sea, una universidad privada. La pública tiene otros objetivos, otros parámetros: estabulación de la juventud, reclutamiento de funcionarios, mantenimiento del mandarinato cultural, "bienestar" social (como el hogar del pensionista o el taller municipal de taichi), desarrollo de un nuevo tentáculo del pulpo estatal... Así que... corrección política y buen rollito.

Nota: lo que se dice de la Universidad, se puede decir igualmente de cualquier otro nivel educativo. Véase el caso reciente de la orden de incentivos en los Institutos.

lunes, 9 de junio de 2008

Por qué las librerías no abren en domingo

Se quejan los libreros de que venden poco. Y los editores, y los autores...

Ayer, paseando por el centro de la ciudad, me pregunté "¿Y por qué estos señores no abren los domingos?". Supuestamente, estas tiendas pertenecen al sector denominado "industrias del ocio". Abren los cines, los restaurantes, los teatros, los bares, los kioskos... ¿por qué las librerías no abren los domingos?

La respuesta está en el viento. O en los convenios colectivos. O en nuestra proverbial cultura empresarial.

martes, 3 de junio de 2008

La musaraña ilustrada

La musaraña, atrapada en un instante, no hace mucho, dice:

Toda filosofía progresista parte necesariamente de esta petición de principio: la naturaleza no existe... Y, si existe, ya la modificaremos.

Pero la volatería, en realidad, no es punto de partida, sino de llegada. No se sabe a través de qué vericuetos. Yo nunca había leído esta frase de Ortega, ni falta que hacía, porque las ideas se transmiten por el aire, por ósmosis, por contagio, por..., sí, incluso por lectura. Así, la musaraña vuela sola, no la necesita, pero también puede llevar ilustración, demostración, prueba, escolio. La ilustración, la glosa, la nota a pie de página, o a pie de musaraña, es ésta:

"El hombre es una entidad infinitamente plástica, de la que se puede hacer lo que se quiera. Precisamente por ella no es de suyo sino mera potencia para ser como usted quiera" (en Historia como sistema).
Y, sí, otra vez Ortega. Y no será la última.

Incipit interruptus

Me gustan los libros en los que el escritor escudriña los entresijos de su oficio, el envés oculto de sus obras, esos libros en los que el escritor se enfrenta a los avatares, resortes y resultados de su vocación.

Estas líneas pertenecen al comienzo de una reseña de un libro de Mercedes Salisachs, titulado La palabra escrita. Radiografía de mis novelas (Barcelona, Ediciones B, 2003). Las encuentro ahora perdidas entre mis papeles. Se conoce que por entonces me propuse escribir una reseña del libro, pero no pasé del incipit. Ignoro por qué no conseguí terminarla. Lo más curioso es que tampoco recuerdo nada de ese libro, ni si me gustó o me desplugo (que diría Azorín). Ni logro ahora encontrar el libro entre mis libros. Me quedo sin saber qué hubiera dicho yo del libro de la Salisachs, o qué me habría propuesto decir. Bueno. Reseña abortada. Pero el principio (en ambos sentidos de la palabra) vale. Y me reafirmo:

Me gustan los libros en los que el escritor escudriña los entresijos de su oficio, el envés oculto de sus obras, esos libros en los que el escritor se enfrenta a los avatares, resortes y resultados de su vocación.

sábado, 31 de mayo de 2008

Soneto en el semáforo


Uf, como la entrada anterior es tan deprimente, y no por el texto en sí de Nietzsche, o por su persona, que al fin y al cabo es un ser digno de piedad y conmiseración, sino porque ha habido y hay quien se lo toma en serio, quien lo sigue y admira, y hasta quien pretende ponerlo en práctica, he decidido tapar hoy mismo la entrada con otra que cambie el paso, la atmósfera, no sé.

Como no se me ocurre ahora nada mejor, copio un poema propio, que no recuerdo de cuándo data, porque yo carezco de la manía migueldorsiana de la fecha exacta, inédito, pero inédito de esos que nunca saldrán de inéditos. Se me dirá que ahora, al darlo aquí, ya pierde su condición de inédito. Y, bueno, técnicamente, sí. Pero el blog, que tantas funciones tiene, tiene también la de papelera. Es como si quemara el poema con la cerilla del blogger. Pues, nada, véanlo ustedes arder. Les prevengo, es una bagatela.

TÚ acompasas el paso de la gente,

la sístole y diástole del cruce

de avenidas, ahora en que reluce

la ciudad encendida de repente.

Tú detienes mi paso. Tú pendiente
me dejas de aquel ojo que traduce

la urbana voluntad que nos conduce

a todos por las calles civilmente.

Y tú por las nocturnas calles das
luz verde a mi esperanza que quizás

a un hogar o a un amor no llegue tarde.

Aunque hay veces que en ámbar repentino
angustia siembra tu fulgor hialino,

que no hay quien al amor le diga: «Aguarde».

Ahora están en su perfecto derecho de disparar al pianista. Todo sea por olvidar (de momento) a Nietzsche.

Nietzsche y la eutanasia


¿Qué es bueno? - Todo lo que eleva el sentimiento de poder, la voluntad de poder, el poder mismo en el hombre.

¿Qué es malo? - Todo lo que procede de la debilidad.


¿Qué es felicidad? - El sentimiento de que el poder crece, de que una resistencia queda superada.


No
apaciguamiento, sino más poder; no paz ante todo, sino guerra; no virtud, sino vigor (virtud al estilo del Renacimiento, virtù, virtud sin moralina).

Los débiles y malogrados deben perecer: artículo primero de nuestro amor a los hombres. Y además se debe ayudarlos a perecer.


¿Qué es más dañoso que cualquier vicio? - La compasión activa con todos los malogrados y débiles - el cristianismo...

(F. Nietzsche, El Anticristo, II)

jueves, 29 de mayo de 2008

Ortega, apóstol de la educación para la ciudadanía

El 12 de marzo de 1910, José Ortega y Gasset dicta la célebre conferencia en la Sociedad "El Sitio" de Bilbao, "La pedagogía social como programa político". Así hablaba Ortega:

"Si la educación es transformación de una realidad en el sentido de cierta idea mejor que poseemos y la educación no ha de ser sino social, tendremos que la pedagogía es la ciencia de transformar las sociedades. Antes llamamos a esto política: he aquí, pues, que la política se ha hecho para nosotros pedagogía social y el problema español es un problema pedagógico".

Y añade:

"Claro está que, para mí, escuela laica, es la instituida por el Estado. Contradiría cuanto he dicho, admitir la libertad de enseñanza que hoy tan aguerridamente toman como bandera los anarquistas conservadores apenas el Estado trata de inmiscuirse en la enseñanza ya privada.

Para un Estado idealmente socializado lo privado no existe, todo es público, popular, laico. La moral misma se hace íntegramente moral pública, moral política: la moral privada no sirve para fundar, sostener, engrandecer y perpetuar ciudades; es una moral estéril y escrupulosa, maniática y subjetiva. La vida privada misma no tiene buen sentido: el hombre es todo él social, no se pertenece; la vida privada, como distinta de la pública, suele ser un pretexto para conservar un rincón al fiero egoísmo, algo así como esas hipócritas Indians’ Reservation de los Estados Unidos, rediles donde se encierran los instintos antisociales de una raza caduca.

No compete, pues, a la familia ese presunto derecho de educar a los hijos: la sociedad es la única educadora, como es la sociedad único fin de la educación: así se repite en las aplicaciones legislativas concretas la idea fundamental de la pedagogía social: la correlación entre individuo y sociedad."

La ventaja de Ortega es que lo dice todo muy clarito. Y luego cuentan que este hombre era liberal. O que Zapatero es un indocumentado.

lunes, 26 de mayo de 2008

Ernestina

El autor del poema "El beso" no era autor, sino autora: Ernestina Michels de Champourcin y Morán de Laredo, que tal era su nombre, aunque normalmente se lo pode y abrevie para dejarlo en Ernestina de Champourcin, que ya vale.

El poema pertenece a su libro Cántico inútil (Madrid, Aguilar, 1936), publicado cuando su autora contaba treinta y un años. Pero muchos de los poemas que lo componen fueron apareciendo antes en la prensa. Son los años en que conoce al que luego será su marido, el también poeta Juan José Domenchina.

jueves, 22 de mayo de 2008

El beso

¡Tus labios en mis ojos!
Qué dulzura de estrellas alisa lentamente
mis párpados caídos...
Nada existe del mundo. Sólo siento tu boca
y el temblor de mi espíritu hecho carne de luz.

Sé cruel al besarme. Desgarra mis pupilas
y arranca de su sombra la lumbre de mi sueño.
Con ella te daré mi última mirada.

¡Abrásame los ojos! Que el peso de tus labios
despoje mi horizonte de lo que tú no has visto.
Quiero olvidarlo todo y anularme en la niebla
que ciñen tus caricias.

¿Quién habrá escrito este poema? ¿Un hombre? ¿Una mujer? ¿Escriben y, sobre todo, sienten de modo diferente el varón y la varona? En estos versos, ¿hay sexo?

Ya daremos los datos. Ahora, sólo, los interrogantes.

miércoles, 21 de mayo de 2008

"No es una operación más"

Lamento que diga eso ahora el ministro de la Gobernación e, interinamente, de la Guerra.
Desgraciadamente, y por mucho que nos alegremos de la operación policial, éste es ya el sexto descabezamiento de una supuesta o real cúpula etarra.

Así, desde luego, se combate a la banda, se la mentiene a raya, pero no se la derrota. Los policías y guardias civiles cumplen con su tarea. Los que no la cumplen, desde hace treinta años, son los políticos. Ahí siguen los etarras en las instituciones, beneficiándose del dinero público (conviene recordarlo, ahora que nos toca pagar el IRPF), ahí están sus mínimas penas que además no cumplen, ahí están legitimados por Ibarretxe y por el mismo Zapatero de una forma o de otra...

También lamento que el ministro de la Gobernación e, interinamente, de la Guerra, hable de que uno de los detenidos anoche en la localidad francesa de Burdeos, era la persona con «más peso político y militar de ETA».

Esa banda de delincuentes ni es política ni, muchísimo menos, militar.

Es, simplemente, una partida de facinerosos.

Pero, si el propio ministro de la Gobernación e, interinamente, de la Guerra, habla así, entonces, verdaderamente, lasciate ogni speranza.

martes, 20 de mayo de 2008

Cicerón y el insensato


Quae qui videat, non indocte solum, verum etiam impie faciat, si deos esse neget. nec sane multum interest, utrum id neget, an eos omni procuratione atque actione privet; mihi enim, qui nihil agit, esse omnino non videtur. esse igitur deos ita perspicuum est, ut, id qui neget, vix eum sanae mentis existimem.

(De natura deorum, Liber II, 44)

Si alguien, viendo estas cosas, niega la existencia de los dioses, no sólo actúa de manera ignorante, sino también impía. Y no importa demasiado si niega su existencia o si los priva de todo ánimo provisor y de toda actividad, porque -me parece a mí- no es posible en modo alguno que exista alguien que no hace nada. Por tanto, resulta tan evidente la existencia de los dioses que apenas puedo estimar que esté en su sano juicio quien la niega.

(Traducciónde Ángel Escobar en Biblioteca Clásica Gredos)

lunes, 19 de mayo de 2008

No cambiaré de nombre

El nombre de esta bitácora, quiero decir. Por más que "Yoenlandia" o "Pájaros posados en los cables" les hayan gustado a algunos.

El consejo de los lectores, de todas maneras, de los lectores que han votado, es terminante. Déjese usted de novelerías, no cambie por cambiar. Si algo funciona y está bien, ¿a santo de qué la mudanza?

Y ahora que caigo, no sé si hablaban de este blog o le daban consejos a Mariano Rajoy.

martes, 13 de mayo de 2008

Al dorso del recibo de la luz


Flores de almendro.
Pregón de primavera
en pleno enero.

* * *

Sobre el naranjo,
el azahar es copo
que huele a blanco.

* * *

Las jacarandas
le regalan al suelo
su siembra malva.

lunes, 12 de mayo de 2008

Defensa monárquica de un Rey republicano

S. M., que Dios guarde, no ha tenido probablemente el momento más feliz de su reinado. A la pregunta de la redactora de El Mundo pudo, y acaso debió, no responder. Pero respondió, emitiendo un juicio (no importa si favorable o desfavorable) sobre el Presidente de su Gobierno. Pero:
a) Un Rey no es un Presidente de República, ni un político al uso: sus palabras deben entenderse desde otros parámetros.
b) Un Rey mira las cosas a mucho más largo plazo que el resto, y las ve desde un pasado más remoto: es otra perspectiva, o sea. Los políticos miden por legislaturas, por elecciones; los reyes otean, como mínimo, por siglos.
d) Leídas en su literalidad, esas palabras no significan nada, o bien pudieran significar justo lo contrario de lo que algunos piensan. "Él sabe muy bien hacia qué dirección va." Pues, claro, estúpidos: otros no saben ni eso.
c) El actual inquilino de la Moncloa no está ahí porque así lo haya decidido S. M. (hubo elecciones el pasado 9 de marzo, ¿recuerdan?) ni S. M. tiene la culpa de que el partido de la oposición ande hecho unos zorros. ¿O es S. M. quien le ha indicado a María San Gil que abandone la ponencia política?